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Nota del editor: damos la más cordial bienvenida a la maestra Úrsula Viridiana Córdova Morales, quien a parttir de hoy se integra al grupo de colaboradores de Paralelo 23
Por Úrsula Viridiana Córdova Morales
Conocimos las conferencias matutinas “Mañaneras” con el expresidente Andrés Manuel López Obrador. Con un lenguaje directo, fuerte, era un león de la selva política, poderoso en la generación de mensajes contundentes, atractivos. Los politólogos dirían capaz de controlar la agenda pública. Eficaz en posicionar sus luchas ideológicas en las charlas y discusiones de la sociedad mexicana. Hábil en distraer o escapar de los asuntos que no quería discutir. La herencia de la mañanera es rica. Un acto de difusión y también de propaganda política.
El día 2 de octubre, la presidenta Claudia Sheinbaum Pardo aparece por vez primera en el espacio de las mañaneras, ahora renombradas como “mañaneras del pueblo”, saluda, comienza con una broma, y se dirige a su audiencia. Era una fecha por demás simbólica, “la matanza de Tlatelolco” de 1968. La presidenta de identifica como hija del movimiento estudiantil del 68, en esa primera mañanera pide disculpas por la masacre.
La presidenta Claudia se ha caracterizado en el tiempo por un estilo de comunicación política particular en las formas con una combinación de emociones sutiles acompañada de momentos fuertes, directos, seriedad y mucho profesionalismo. En estas primeras conferencias se han hecho presente esas cualidades, además de un humor presente que se asoma en un esbozo de sonrisa que tiene tatuado en la comisura de sus labios, más no se atreve aún a exponerlo en demasía en el espacio del ejercicio del poder. A veces se le ha calificado como rígida o seria, comparándola con el estilo comunicativo del ex presidente Andrés Manuel López Obrador.
Ha llegado a las primeras mañaneras con diversos trajes sastre de distintos colores, verde oscuro, lila fuerte, rosa palo, con su ya conocido peinado de coleta, recogido, con uñas francesas, con un estilo contemporáneo de vestir, mostrando gustos personales de imagen a la hora de posicionarse en la tribuna de la mañanera.
3 y 4 de octubre 2024. La mañanera del pueblo. @gobiernodemexico
De acuerdo con la periodista Georgina Zerega(2024) del País, a la presidenta “le gusta el orden”, y no es una sorpresa, la visión organizada, esquemática de toda científica. Zerega destaca: La presidenta Claudia Sheinbaum ha llegado y ha renovado la estructuración de las mañaneras, nuevas reglas, 18 lineamientos de comportamiento fueron entregados a la prensa, entre ellos destaco: “No se puede tomar el micrófono y hablar más de cinco minutos. No se puede hablar de cuestiones personales. Tampoco se pueden llevar documentos, cartas, peticiones. Solo se pueden hacer dos preguntas. No se puede hablar, comer, tomar café. Menos levantar el celular para sacar una fotografía.” La organización de la semana quedó, lunes vida saludable, martes humanismo mexicano y memoria histórica, miércoles detector de mentiras, jueves mujeres en la historia y viernes suave patria. En cuanto a la duración, el portal eje central (2024) nos dice que la primera “mañanera del pueblo” duro 1 hora 19 minutos, la conferencia más larga de Andrés Manuel López Obrador duro tres horas 35 minutos.
La presidenta Claudia sigue el estilo de informar sobre temas relevantes que ocurren en los diversos estados de la república, responde las preguntas de los reporteros, es concisa, breve, en ocasiones no elabora demasiado, pareciera que quisiera ser muy puntual en temas que aún no quiere responder. Hay momentos en dónde muestra fuerza y contundencia con mezcla de sarcasmos, por ejemplo, cuando se le pregunto sobre la actitud de los ministros frente a la reforma del poder judicial: “Ellos saben que lo que están haciendo esta mal…están buscando la manera de parar la transformación, a la transformación, que es una decisión del pueblo de México, no la pueden parar 8 ministros de la Suprema Corte de Justicia…” Son los primeros días de la presidenta en el poder, en el espacio de comunicación gubernamental, son las primeras mañaneras del pueblo, conveniente seguir el camino de dedicación profesional, de transformación, logros y justicia social pero también abrir nuevas dimensiones y posibilidades de ser, de conectar con la sociedad, de recurrir a distintos rostros esenciales de personalidad, tomar confianza y exponer sus facetas, el rostro de la indignación, de la alegría, del humor, el júbilo, de la pasión, porque después de todo la mañanera es comunicación política del gobierno en funciones, y una estrategia eficaz para dominar adversarios y conquistar a su audiencia.
Foto portada/Facebook Claudia Sheinbaum
