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@Mario Marftini
Permítanme empezar con una pregunta de alto calado:¿Vale la pena el naufragio de los tres poderes constitucionales de Sinaloa por defender a un hombrecillo mezquino, frívolo, inepto, desquiciado, ruin, alcohólico, misógino, traicionero y corrupto?
Cualquier lector con dos dedos de frente tiene la respuesta correcta: es un verdadero despropósito que solamente podría ocurrir en un mundo bizarro. Ni de vecino lo quisieran tener.
Miles de mazatlecos han expresado su ira por el rescate de último momento que el gobernador Rocha Moya hizo del Quimico Luis Guillermo Benítez Torres que iba a paso veloz rumbo al patíbulo. Y aunque los juicios políticos y penales siguen su marcha, los ciudadanos quieren -con mucha razón y justificación- que corra sangre. Un paseillo del gobernador por el montículo del Teodoro Mariscal le daría la dimensión del enojo social, provocado por esta decisión inesperada (unas horas antes había asegurado que no iría ni a su informe)
• Un poder
Otra vía de agua ocurrió con el rechazo de la solicitud de juicio político que presentaron 10 organizaciones civiles de Mazatlán ante el Congreso del Estado por un simple tecnicismo: “no la ratificaron dentro de las 72 horas después de presentarla” La Ley no habla de horas sino de 3 días hábiles, argumentan los demandantes, pero les contaron cada minuto y les dieron palo.
Sin embargo, esta circunstancia tiene otra interpretación y beneficios: los ciudadanos pueden presentarla nuevamente. Puede tomarse como una señal del Poder Legislativo para amarrar bien el expediente y no se le escurra como la de Jesús Estrada Ferreiro que está colgada de artilugios jurídicos. Y por otro lado, las organizaciones civiles pueden esmerarse para elaborar un documento sólido, contundente, irrefutable y demoledor con el acompañamiento de miles de firmas del pueblo agraviado.
• El otro poder
Es cierto, en un muy mal momento el gobernador rescató a Benítez Torres cuando ya tenían su catre en el Cereso. Pero algunos episodios recientes apuntan hacia la inevitable muerte política por desahucio e inanición: en lugar de enviarlo al Gran Prix automovilístico de Fórmula 1, Rocha lo mandó a la Feria del Raspado en Concordia, previa inauguración de una cantina en el puerto, esa si con representación oficial. Tampoco lo invitó al pastel conmemorativo de su primer año de gobierno, al que asistieron todos los secretarios del gabinete (foto).
• Espantajo
Quienes lo han visto recientemente, describen al Químico como un espantajo solitario sin rumbo y sin fe, acabado, repudiado, caegando tremenda cruda mortal. Su llegada a la Secretaria de Turismo fue recibida con una salva de renuncias. Ha tratado de buscar cita con los bravos hoteleros de Culiacán -no como los de Mazatlán que operan por conveniencia personal- que no quieren saber nada de él, incluso poniendo en riesgo las gestiones de su proyecto madre: extender la ruta del Chepe hasta Mazatlán.
• El otro más
Por la secrecía de la investigación, la fiscal general Sara Bruna no ha declarado más de lo necesario sobre la vinculación a proceso. Pero ha dado señales de que los hechos delictivos rebasan cualquier acuerdo político, así hubiera sido ordenado por el mismísimo presidente de la República.
Si lo imposible ocurriera en este caso histórico, sería un enorme lastre para la gobernabilidad de Sinaloa, la mayor vergüenza para la sociedad sinaloense y para el gobernador lo que fue para Peña Nieto la Casa Blanca de la Gaviota. Es decir, el inevitable ahogamiento del ex alcalde provocaría el naufragio de la 4T en Sinaloa con todo y su discurso de humanismo social y combate a la impunidad. Todo por defender a un frustrado y nefasto capo político que debería estar en prisión.
Vuelvo a preguntar: ¿vale la pena naufragar y ahogar a toda la tripulación?
Saludos cordiales
MM
Foto: todos los secretarios, menos el Químnico
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